1. Chillar, gritar y aclamar son vocalizaciones que producen
irritación laríngea y generan traumatismo laríngeo.
2. No debemos hablar mientras estemos llevando o empujando objetos pesados.
3. No aclarar la garganta, carraspear, ya que, daña la laringe.
4. No hablar excesivamente. Después de una hora de hablar, tomamos media hora para descansar, o en su caso, hidratar la laringe tomando líquidos.
5. No hablar excesivamente cuando los pliegues vocales se encuentran en condiciones débiles: cuando la laringe está excesivamente seca, tras haber forzado la voz, durante constipados, alergias, en los días previos al ciclo menstrual.
6. No respirar por la boca, ya que, se ve alterada la humidificación natural, la laringe se seca y se irrita, mantener siempre una inspiración nasal.
7. No hablar si antes no hemos tomado aire por la nariz y no utilizar una intensidad muy alta.
8. Eliminar bebidas frías y muy calientes. Beber abundante agua.
9. Eliminar el tabaco, el alcohol, los ambientes cargados de humo o muy caldeados, los cambios bruscos de temperatura y la ingestión de alimentos irritantes.
10. Reducir al máximo las situaciones de agotamiento nervioso, la falta de sueño, el descontrol emotivo, la vida agitada y el estrés.
11. Estar y dormir en un ambiente ligeramente ventilado.
12. Evitar el aire acondicionado.
13. No realizar esfuerzos en el cuarto de baño, una alimentación sana y equilibrada favorece el funcionamiento y evacuación intestinal.
2. No debemos hablar mientras estemos llevando o empujando objetos pesados.
3. No aclarar la garganta, carraspear, ya que, daña la laringe.
4. No hablar excesivamente. Después de una hora de hablar, tomamos media hora para descansar, o en su caso, hidratar la laringe tomando líquidos.
5. No hablar excesivamente cuando los pliegues vocales se encuentran en condiciones débiles: cuando la laringe está excesivamente seca, tras haber forzado la voz, durante constipados, alergias, en los días previos al ciclo menstrual.
6. No respirar por la boca, ya que, se ve alterada la humidificación natural, la laringe se seca y se irrita, mantener siempre una inspiración nasal.
7. No hablar si antes no hemos tomado aire por la nariz y no utilizar una intensidad muy alta.
8. Eliminar bebidas frías y muy calientes. Beber abundante agua.
9. Eliminar el tabaco, el alcohol, los ambientes cargados de humo o muy caldeados, los cambios bruscos de temperatura y la ingestión de alimentos irritantes.
10. Reducir al máximo las situaciones de agotamiento nervioso, la falta de sueño, el descontrol emotivo, la vida agitada y el estrés.
11. Estar y dormir en un ambiente ligeramente ventilado.
12. Evitar el aire acondicionado.
13. No realizar esfuerzos en el cuarto de baño, una alimentación sana y equilibrada favorece el funcionamiento y evacuación intestinal.
Algunas de estas pautas pueden
parecer evidentes, pero no debemos olvidarlas.
En caso de que algún día
necesitemos hablar si o si, y no tengamos voz, suelen recomendar unas pastillas de clorato potásico, que nos
pueden sacar de un apuro pero de las que no podemos abusar ni acostumbrarnos a
tomarlas diariamente. Las tomaban las cantantes de ópera. Pero ya sabéis pedir consejo al farmacéutico. Yo no las he usado pero me han dicho que son buenas.
Espero que os sirva todo esto.